28 de Juny de 2008

Con un gran señorío ha presentado Sandro Rosell sus intenciones de acceder a la presidencia del FC Barcelona, si el voto de censura del próximo día 6 de julio obliga a la actual directiva del club azulgrana a convocar elecciones inmediatamente, tal y como hace suponer el ambiente que se respira entre la gente blaugrana. Rosell, con humildad, concrección y naturalidad expuso la actual situación del Barça, que conoce perfectamente, y dejo claro que el actual presidente, con su prepotencia y engaños al socio va a recoger lo que ha venido sembrando desde que accedio al cargo que ocupa.

Sandro Rosell, desde que decidió abandonar la vicepresidencia del club por su total desacuerdo con la manera de hacer de Jan Laporta, se ha venido preparando para acudir a las urnas, en silencio, sin declaraciones aunque los más próximos han vivido momentos en los que Rosell ha dudado en salir a la palestra para demostrar las falsedades que se venían diciendo, pero ha podido más su barcelonismo y su seny y ha seguido trabajando en la sombra para dar el salto en el momento preciso.

Rosell ha hecho pública su intención de acudir el próximo día 6 a votar favorablemente la moción de censura, lo mismo que hará el ex presidente Josep Lluis Nuñez y el ex candidato Josep Maria Minguella, y ha asegurado que, a pesar de las declaraciones de Laporta, con esa moción la entidad no puede desestabilizarse porque "la junta es culpable de todo lo que sucede en el club que, además, lleva mucho tiempo desestabilizado".

Rosell con su vuelta a la actualidad azulgrana ha devuelto la ilusión a los socios y aficionados que ven en el ex vicepresidente a una persona seria y capaz de llevar la nave por un buen rumbo, canalizando los sentimientos de todos (TODOS) los seguidores, sin excluir a nadie ni por su procedencia ni por sus convicciones políticas, recuperando a jugadores que aún tienen mucha clase pero que la desorganización y el desorden han llevado por el mal camino devaluándolos totalmente.

El futuro del Barça con Sandro Rosell es esperanzador porque es capaz de unir y no desunir como el actual presidente que busca más su proyección personal que los intereses del club y que después de pregonar a los cuatro vientos su apoyo "incondicional" a la selección catalana criticando incluso a algun jugador por acudir al combinado español, no ha dudado en aceptar una invitación de Ángel María Villar para estar el domingo en el palco durante la final de la Eurocopa y así poder aparecer en las distintas televisiones al lado de las principales personalidades. Repito, que gran diferencia entre el señor Sandro Rosell y el prepotente Jan Laporta.